sábado, 8 de octubre de 2011



Pudriéndome en tu espejo,
con la luz de tus ojos
fingiendo mirar mis senos rasgados,
empapados de amor barato.

Ya sólo me queda un poema tuyo,
tatuado en una piedra,
simulando mi epitafio.



[ Ilustración y texto: Anaís Ferrer ]

9 comentarios:

  1. Buenas palabras...

    Sobretodo me gustó lo del poema tatuado en una piedra...y el epitafio.

    Me recuerda unas palabras del poeta chileno Nicanor Parra. Dice que su poesía es como una montaña rusa -

    "Suban, si les parece.
    Claro que yo no respondo si bajan
    Echando sangre por boca y narices."

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  2. Ese vacío que deja alguien, dejando algo frio, y duro a cambio u.u

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  3. pero incluso en el mas frio y duro suelo, puede nacer una flor...

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  4. Un epitafio es un dulzura, un cuento que no recuerda en dónde crecen los sentidos y terminan los espasmo benditos.

    Saludos.

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  5. Que lindo todo!!!
    Sencillo, corto, no se necesita más.

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  6. Que bello! Con mucho feeling, wow me quedo quieto, me estas dando una linda leccion, me facina tu arte! Felicitaciones.

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